Este lunes 29 de enero, en la sala de prensa de la Casa del Deporte, se ha presentado en sociedad el libro del Centenario de la Federación Navarra de Atletismo con el que se pone broche final a las efemérides del Centenario de la Federación.
Al acto asistieron el subdirector del INDAF Xabier Larraya, el gerente de la Fundación Indurain, Ernesto Modrego, el presidente de la Federación, rodrigo Domínguez, y la autora del libro, Raquel Idoate.
En palabras de la autora el libro relata la historia del atletismo navarro desde sus inicios, desde las primeras expresiones atléticas de la mano de los korrikolaris, que se retaban en escenarios como las plazas de toros o en espacios rurales, y alguno de los cuales alcanzó gran fama en su momento. Casi a la vez que ellos se disputaban las victorias, en la Pamplona de los años veinte se comenzaban a dar los primeros pasos del atletismo federado, que resultaría en la Federación Atlética Navarra, cuyos primeros estatutos localizamos en el Archivo Real y General de Navarra.
La obra continúa con el devenir de la Federación a través de los años, con épocas mejores y otras más duras, como la mitad de la centuria, pero deja claro que el atletismo navarro siempre tuvo representantes y atletas que compitieron incluso en las condiciones más adversas.
El pasar de los años nos lleva a los ochenta, periodo en el que el atletismo navarro despierta, con nuevas instalaciones y más organización, que permite a los atletas destacar tanto a nivel regional como nacional.
Todo este trabajo nos ha traído hasta hoy, cuando el atletismo navarro vive su época dorada y llena las noticias de éxitos.
Para llegar a este punto, es importante tener en cuenta a las personas que han trabajado en la organización de este deporte a lo largo del tiempo, motivo por el cual se incluye un capítulo dedicado a presidentes de la Federación y a los jueces, que han permitido el desarrollo y fiabilidad de las pruebas desde los inicios, muy interesante, por cierto, para conocer cómo se controlaban las pruebas cuando apenas había medios.
También hay un espacio especial para los clubs de ayer y de hoy, verdaderos promotores del atletismo en sus respectivas localidades.
El atletismo femenino ocupa las páginas centrales del libro. Si bien las mujeres no hacen su aparición firme en el atletismo hasta bien entrada en la centuria, encontramos una referencia anterior, en 1936, en un club con sección femenina, que desgraciadamente tuvo una vida muy corta. En cualquier caso, desde la irrupción de las mujeres en el atletismo navarro, pronto ofrecieron grandes marcas y destacaron en el panorama nacional. Desde entonces, la presencia de las mujeres en el atletismo ha sido constante, llegando a contar hoy la Federación con más fichas femeninas que masculinas.