A 7100 metros de altitud, con un fuerte temporal de nieve y viento en su contra, sin agua y sin nada que echarse a la boca, el veterano alpinista Italiano Valerio Annovazzi permaneció tres días esperando que un milagro consiguiera rescatarle de lo que parecía una muerte segura en las montañas del Gasherbrum II, en la cordillera del Karakorum, en el Himalaya. Y el milagro se produjo. Sus salvadores fueron los vascos Alberto Iñurrategi, Juan Vallejo y el Navarro Mikel Zabala,.
A sus 59 años años Valerio Annovazzi, albañil de profesión, puede presumir de haber tocado la cima de algunas de las más altas montañas del mundo.
